Cierro mis ojos y un torbellino de imágenes que encienden sentimientos se apoderan de mi. ¿Por qué no puedo dejar de sentir? Olvidar y ver adelante, como la felicidad que no tiene memoria.
Estoy enamorada de un fantasma, me pediste ya no existir en mi vida y sin embargo todos los días vivo contigo en mi memoria. Me creía culpable de absolutamente todo, pero hoy me exigí ser indulgente conmigo misma así como los soy con todos. Era yo y mis circunstancias, hoy me arrepiento de decisiones tomadas y sin embargo en su momento creí que eran las mejores a elegir.
Espero esto sea un purgatorio con salida. Espero algún día volver a ver ese brillo en tus pupilas.
Esperanza